Aquellos que pueden hacerte creer absurdos, pueden hacerte cometer atrocidades

 

Murieron cuarenta millones de personas, por causa del SIDA, (síndrome de inmunodeficiencia adquirida), y siguen muriendo, evidentemente, en el tercer mundo.

Como si fuera un miembro de la Trilateral, voy a obviar por el momento, ese tercer mundo, en donde la vida no vale nada, o casi nada, y voy a intentar centrarme en nuestro mundo, el de las naciones donde viven los ricos.

Cuando empezó el SIDA a ser un problema, que nos afectaba, lo primero que se hizo fue convencernos que era una cosa tremenda, que como un castigo de Dios, atacaba a homosexuales, drogadictos, y gentes muy promiscuas y descuidadas.

Como consecuencia, se estigmatizaron a personas por su orientación sexual, o por haber caído en el mundo de las drogas por vía parenteral.

Nos olvidamos que uno de los motivos de contraer la infección, eran las transfusiones de sangre, ya que aún no había, ni medios diagnósticos ni protocolos de actuación para evitar el contagio por esa vía.

Esto en países donde la donación de sangre no era altruista, hizo que el problema se agudizase.

Hasta que no llegó el tratamiento en el 97, que permitía que la infección fuera crónica, las barbaridades que se hicieron fueron innumerables.

Las personas eran tratadas como bombas peligrosas, simplemente por el miedo provocado por las campañas interesadas de grupos ultraconservadores.

Recuerdo las imágenes tremendas de enfermos terminales en televisión, o el aspecto en los últimos días de Rock Hudson, o Fredy Mercury, pero ya se sabe, eran homosexuales. También recuerdo las imágenes de presos españoles con sida en los tejados de la Modelo en Barcelona. Fue toda una campaña…..¡Ah!, y dos grandes negocios por fin vieron la luz, los preservativos, y las jeringuillas desechables.

Esta utilización de una enfermedad para anatemizar determinados grupos sociales, se fue al garete, creo, con la llegada de la cura. Así que la tendencia de los grupos homosexuales a manifestarse normalmente no pudo ser impedida, y la heroína perdió su preponderancia como droga de moda, ¿los condones?, bien, gracias.

Cuántos absurdos nos han hecho creer en los últimos, digamos treinta años. Las posibilidades de difusión de mensajes se han multiplicado gracias a Internet, y con ello, no solo se han podido llevar a cabo campañas de intoxicación interesada, sino que también se ha podido monitorizar y corregir sobre la marcha, según el impacto que esté causando en la población, casi en tiempo real.

En esta bitácora, empieza a ser casi obsesivo el problema de la información que recibimos, como nos manipulan, como nos controlan, y consecuentemente, que barbaridades nos impulsan a realizar.

Estoy pensando en las veces que nos han hecho creer en tal o cual “malo de la película”, y nosotros, que no podemos contrastar nada, nos lo hemos tragado hasta el fondo….y lo que es peor, hemos actuado en consecuencia.

En temas menores, que de alguna forma he podido contrastar lo que se me dice con lo que veo, constato que difícilmente mi percepción cuadra con lo que leo, oigo, o me cuentan, por lo que intuyo que me están dando una información sesgada, esperando de parte de todos los que compartimos esa información una reacción similar, quizás no igual, pero que puede conseguir que un grupo humano se mueva en la misma dirección.

En algún sitio, seguramente, he dicho que eso de la lucha de clases, acabó, de forma que lo que ha sustituido a las clases son las formas de vida, el ser miembro de algo.

Si no quisieran manipularnos, por ejemplo, sería lo mismo leer el periódico deportivo A o B, para saber si fue penalti, o fuera de juego la jugada que hizo perder el campeonato, pero no, delante de un hecho objetivo, se manipula con el fin de cohesionar a los que comparten la forma de vida de ser del equipo A por ejemplo.

Eso te garantiza, una serie de clientes fijos que cada día te serán más fáciles de manipular.

En la política, donde la clientela fija es muy importante, ya que te da parcelas importantes de poder, la manipulación llega a tal grado, que sabes que lo que te diga un partido, es siempre mentira, sea lo que sea, o por lo menos la verdad que te ofrecen es una verdad sesgada, a medias, en la línea de lo que les pueda interesar.

Algo que me aterroriza, es el grave problema de la profesión de periodista, ese notario sin oposiciones de lo que ocurre a nuestro alrededor. Parece que hay una serie de elementos que están acabando con las empresas periodísticas. Internet, y la oferta de noticias gratis. Las informaciones de agencias que se repiten en todos los medios, y que ya no pueden ser contrastadas porque nadie quiere pagar corresponsales de guerra, o mantener empleados por todo el mundo.

Si un gobierno, un grupo económico, un grupo religioso, quiere propagar una consigna es muy fácil, y el método lo conocemos todos, pero la realidad, ¡Ay amigo!, de esa olvídate.

Cuando veo informativos en las televisiones de nuestro país, constato que la mayoría de las informaciones, provienen del material que directamente el gobierno, o los partidos políticos nos ponen delante de las narices, y de contrastar, nada de nada.

Lo que viene del extranjero, viene de agencias, y son monocolor, no existe a mis ojos sobre un acontecimiento, el punto de vista de la CNN, contrastado con Al Jazzira, o con TAS, o con la agencia, o la cadena China, o Japonesa que pueda corresponder.

Dos veces en mi vida he coincidido viajar a sitios en los que el día anterior había acontecido un terremoto importante. El primero en San Francisco, y el segundo en Estambul.

En ambos se hablaba en las informaciones disponibles de situaciones de catástrofe global, que en ninguno de los dos casos pude apreciar en la dimensión que se me transmitía. En ambas ciudades se habían producido daños, cierto, pero desde ahí a la percepción transmitida por los que me informaron…parecía que hablaban de otra cosa.

La facilidad de manipulación, se ha multiplicado últimamente hasta cotas casi insoportables, debido a la direccionabilidad de las búsquedas vía Google o similares, de las que me temo viven los becarios que llevan hoy las redacciones de los informativos. Es pues facilísimo dirigirte a tu grupo con la información no veraz, o no contrastada, y que te sirva para mantenerlo cohesionado y dispuesto a seguirte.

Mala solución tiene el asunto, y lo que es peor, a estas alturas de la película, creo que no soportaríamos conocer la verdad desnuda. Nos han educado mintiéndonos a explicarnos nuestra historia, de forma que han creado grupos que creen que Drake era un gran hombre. o un pirata… depende. O que los españoles nos portamos bien en Sudamérica, o que fuimos unos excepcionales cabrones, para el estándar de la época. Los ejemplos son infinitos.

Daremos pues la razón a Orwell, el ministerio de la Historia existe, modifican los sentidos de las palabras para ajustarlos a nuestros deseos (daños colaterales en un conflicto armado, por muerte de civiles indefensos por acción de agresión militar, por ejemplo), y el Gran Hermano, no solo nos mira, sino que nos escucha, nos lee, nos manipula, y hace que hagamos barbaridades.

Buenas noches y buena suerte