…..Sangre de Hispania fecunda

Mi amigo el Profesor Felipe Debassa, ha publicado un cabreo a cuentas de las campañas que se están extendiendo en Hispanoamérica acerca de lo malutos que hemos sido los españoles, aprovechando una entrevista de una televisión colombiana al Profesor Azcona. No he podido por menos que responderle, y recomendar que se busque en You Tube la citada entrevista.

Me ha encantado el comentario que haces a la entrevista del Prof. Azcona, de la misma forma que me ha parecido magnífica la respuesta al entrevistador, a quien por cierto le ha dejado sin demasiadas ganas de réplica, y planteándose cuántos oyentes manipulados iba a perder al emitir esas cosas…..en fin.
Si me permites, quisiera añadir algo, no desde el punto de vista de un profesional de la historia, que no soy, ni podré llegar a serlo, dada mi provecta edad, sino del pobre gachupín pendejo que se ha pateado el continente, que por cierto debería llamarse Colombia, desde St John’s a Ushuaia, y desde Vancouver al Cabo de Hornos, a Juneau no pude llegar, que los yankis descubrieron que había visitado Persépolis e Isfaán, y me negaron la entrada. (No voy a entrar en detalles si desde Edmonton a Punta Arenas, o al Chalten, pero también).
Desgraciadamente no he conocido ni Uruguay ni Paraguay, aunque los he visto de lejos, pero eso no vale.
Cuando cruzo el norte, hasta el Río Grande, por mucho que me esfuerzo, no logro escuchar ni una sola palabra en las calles en las lenguas autóctonas americanas anteriores a la llegada de los ingleses, mejor dicho, de los puritanos, y de sus enemigos, en aquella época, y aún hoy, los prebiterianos escoceses. Todos hablan un mal inglés, porque bien es sabido, que ni en las películas se encuentra a un descendiente de los indígenas pre Pérfida Albión, ¡Ah!, y los negros, ciudadanos de segunda o tercera que si no los eliminaron, no fue por falta de ganas, unos porque les cultivaban el algodón, les calentaban la cama, y les limpiaban la casa, y otros por aquello de la pela, que si se cargaban el esclavismo, se cargaban a un competidor, y ahí los dejaron a comerse los mocos, que como no eran WASP, pues que les den, que aquí somos muy demócratas, ssi tu etnia es la apropiada.
Los que quedan, están recluídos en reservas, y sus posibilidades de alcanzar la presidencia bien de Canadá bien del vecino del sur, son directamente cero. Y llevas razón querido Profesor, a eso se llama genocidio, y lo demás son bobadas.
Dejando las islas a un lado, (mucho habría que hablar del Caribe, del esclavismo, de Jamaica….pero será otra vez) lo primero que te encuentras al cruzar el Río Grande, es que la fisonomía de la gente ya no es la del blanquito, alto, rubio, de ojos azules, sino que son morenito, bajitos, de pelo oscuro, vaya, que tienen mucho de precolombinos, con algún toque extremeño, los hay ladinos(mestizos) a partes iguales, o directamente precolombinos. Paseas por Chiapas y ….tamblén se habla castellano, entras en Guatemala, y si te preguntas donde están los mayas, y por qué se extinguieron, resulta que no, que los hay a cientos de miles, hablando su quechua, o alguna de sus variedades, y en algún caso, algo de castellano. Poco genocidio vi por aquí, es más, si vas a Chichicastenango, verás como se adora a la Pacha Mama, a la Virgen con tres niños, y caminarás entre gente y mercados milenarios, y en el lago Atitlán podrás darle algo al Maximón….y si quieres
Y así vas viendo, a medida que te adentras en el continente, que la Amazonia está poblada por los de siempre, hasta por tierras de Manaos, a pesar de las industrias caucheras, que algo de mezcla trajeron.
Quito es una ciudad indígena, menos los palacios e iglesias que construyeron los «genocidas» españoles, no te digo Cuenca, no te digo…..De La Paz, de Sucre hasta de Potosí, o Arequipa..(por cierto, repasaros la biografía de Antonio José de Sucre, ya que estamos.

Entrad en el Altiplano, y ya me diréis lo que hay de genocidio,
Y sí, como dice el Profesor Azcona, está lleno de Universidades fundadas por los genocidas españoles, de hospitales, de templos religiosos, de edificios civiles y oficiales, que nadie parece decidido a eliminar, para que no quede nada de lo que trajo el Imperio español, ¡malditos genocidas!. Si quitas la herencia española, no sé yo lo que queda, pero lo veo «futut». Eso sí, una estatua es baratito tirarla, y ademas sale en la tele y se hace viral.
He visitado las misiones en Bolivia y en Argentina. En Bolivia siguen en pié, y siendo útiles a la manera del siglo XXI al los chiquitanos, y no ví a nadie que renegara de esa herencia, todo lo contrario, (debe ser el síndrome de Estocolmo). He visto los pueblos mochicas cerca de Trujillo viviendo como siempre, Lima, Cuzco, llenas de templos, de palacios, que si recuerdan al genocida español deberían arrasarlos de una vez, incluída la Iglesiuca de San Martín de Porres, que a la postre fue un efecto colateral de la religión de los malditos españoles.
¿Qué quedaría de Bogotá si destruimos Santa Fe?, ahí, recordando como nos dedicamos a apiolar indígenas.
Los españoles llegamos a ese lado del Atlántico, con permiso de la Santa Sede, a cristianizar, que si no, nasti de nasti, así que lo primero que se hacía era bautizar, lo que te convertía en ciudadano español con todos los derechos, a la romana, vamos, y sí, que hubo quienes se pasaron, cierto, pero también lo hacían en España, y hoy lo hacen los seguidores de las economías ultraliberales, los políticos corruptos, y quién tú quieras. Pero a esos, aunque tarde y mal , ayer y hoy se les persigue y, a veces, se ganan un pescozón. Si la genocida España, no hubiera protegido a los nuevos subditos de la corona, Fray Bartolomé de las Casas, jamás hubiera levantado la voz, y ciertamente, parió una forma de «Declaración Universal de los Derechos Humanos». Un anglosajón jamás lo haría, (recordad el otro genocidio británico en Australia), allí a los aborígenes, directamente no se les consideró seres humanos por ley dándoles derechos, hasta la segunda mitad del siglo XX.
Así, que no me fastidien, que estoy muy mayor, que si no llegamos los españoles, andarían aún comiendo corazones recién sacados de los pechos de los prisioneros, o directamente, si hubieran aparecidolos ingleses, no quedaría nadie.
Así, que por favor, hagan lo que quieran, pero digan la verdad, y esa está en los estudios científicos de los historiadores, que, por cierto, deberían abundar más, de forma que llegasen a las escuelas, que es donde estos temas deberían explicarse, y sobre todo evitando el presentismo.
Para terminar, solo se me ocurre una frase o comentario que he debido oír o leer en algún sitio: «La conquista, la hicieron los aborígenes americanos, y la liberación la hicieron los españoles»
Valet

Un comentario sobre “…..Sangre de Hispania fecunda”

  1. Acertado tema para reanudar tus escritos, pasarán muchos años antes de que la Leyenda Negra se olvide, sobre todo con politicastros e independentistas tan dañinos como los que tenemos aquí a los que les interesa difundirla y actualizarla continuamente.
    Saludos

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